¿El insecticida que utiliza regularmente dejó de funcionar o ya no surte
efecto como solía hacerlo?¿Hay alguna manera de sortear este problema?
Estos eventos están ocurriendo en todo el mundo, de manera constante y cada día más
frecuente.Estos eventos están ocurriendo en todo el mundo, de manera constante y cada día más
frecuente.
En la mayoría de los casos se debe a que las poblaciones de las plagas se hicieron resistentes o
tolerantes al producto en las concentraciones habituales.
Esta resistencia es producto de un cambio heredable en la sensibilidad de una plaga, reflejado en repetidos fallos de un producto para alcanzar los niveles de control esperados de acuerdo con las recomendaciones de la etiqueta de la misma plaga (IRAC).
Dentro de los mecanismos de resistencia de los insectos se dan por cambios en diferentes
funciones:
- A su penetración (por cambios en su comportamiento o en su cutícula) a la excreción (al aumentar).
- Al incremento de la desintoxicación (aceleran la metabolización del activo).
- Cambios en el sitio de acción (modificación del sitio diana).
Al mismo tiempo, para preservar la salud de los consumidores, los mercados exigen no usar
más de un determinado número de activos se configura un importante y creciente desafío
para los técnicos. Es vital defender el principio de inocuidad para el bien de las personas, del
medio ambiente, no podemos olvidar que ambos llevan aparejados altos costos y muchas
veces efectos irreversibles.
Disponer de un Insecticida que no genere resistencia y que no sea tóxico para las personas
pareciera ser un ideal para los sistemas productivos.
Esten 80 es un insecticida acaricida biobased que presenta esas características, constituye una
herramienta poderosa para contener el avance de las resistencias. Controla las plagas de
manera eficaz y sustentable hacia el medio ambiente. Su eficacia está comprobada en
numerosos estudios de relevancia y por la cantidad de productores que lo aplican en
diferentes cultivos.
Esten 80 actúa físicamente sobre los insectos y ácaros. Lo hace de tres maneras: Sofocación,
Deshidratación, Desecación. Su principal efecto es la disolución de la cutícula del
exoesqueleto, al disminuir su resistencia comienza a perder agua desde su interior y a
resquebrajarse, acelerando la muerte del insecto.
No hay manera de que el insecto tenga resistencia ya que no es un tóxico. Esten 80 no
necesita penetrar para actuar, solo debe estar en contacto en una concentración y tiempo
suficientes para lograr su función. No ingresa al insecto y al no estar adentro, no hay cambios
en los sitios de acción, ni en los mecanismos de excreción, ni metabolización que permitan
generar resistencia.
El futuro de la seguridad alimentaria está en manos de los productores que incansablemente
busquen hacer una agricultura eficiente y sustentable.
En Tensac somos parte de eso.